Hoy, 8 de marzo, recordamos el histórico incendio en la fábrica Triangle Shirtwaist en Nueva York donde fallecieron 129 mujeres (la mayoría jóvenes e inmigrantes), quienes luchaban por la reducción de las extenuantes jornadas laborales, condiciones dignas de trabajo y mejores salarios y que diera nacimiento simbólico al Día de la Mujer Trabajadora. Desde ese día y gracias a una lucha internacional de mujeres trabajadoras, el mundo conmemora su lucha por la igualdad y el ejercicio efectivo de sus derechos laborales y sociales. La demanda de justicia e igualdad efectiva de derechos entre hombres y mujeres constituye el principal objetivo de este #8M.

Hoy, en homenaje a tal conmemoración, creemos oportuno como informáticas reivindicar la labor de numerosas informáticas que a lo largo de los años han ido construyendo hitos ejemplares para las ciencias de la computación y para los derechos laborales y sociales de las mujeres. Desde las bases fundamentales que asentaron pioneras como Ada Lovelace -la primera persona en desarrollar un algoritmo-, Margaret Hamilton, ingeniera informática de la NASA y responsable de la creación del término ‘ingeniería de software’ y una de las máximas responsables del programa Apolo, Stephania ‘Steve’ Shirley, una de las primeras fundadoras de una empresa de software en la que contrataba mayoritariamente mujeres y de las primeras en fomentar el teletrabajo, Grace Hopper, quien desarrollara el primer compilador para un lenguaje de programación y descubridora del primer bug, hasta las pioneras argentinas, como Cecilia Berdichevsky y Rebeca Cherep de Guber, fundadoras junto con Manuel Sadosky del Instituto del Cálculo y programadoras de Clementina, la primera computadora argentina destinada a investigación científica. Rebeca Guber fue, además, creadora del programa de la carrera de Computador Científico, primera en Latinoamérica, y Berdichevsky fue la principal programadora de Clementina. Gracias al trabajo de estas mujeres que las precedieron, Liana Silvia Lew, Noemí Susana Silvia García, Ana Cristina Zoltan Torres y Clarisa Dulce Cortés desarrollaron junto a Wilfred Durán el primer lenguaje de computación, COMIC, al mismo tiempo que IBM desarrollaba FORTRAN.


En este #8M las trabajadoras informáticas queremos resaltar el trabajo y la militancia de todas estas mujeres como el mejor ejemplo a seguir y como guía de acción para nosotras tanto para hoy como para el futuro. Desde el gremio incentivamos que cada vez seamos más las mujeres informáticas que asumamos roles de referencia en el sector, además de sostener siempre nuestro permanente reclamo para que sean desterradas las desigualdades de género, el acoso sexual, las trabas que nos impiden desarrollar tareas en el sector y la brecha salarial por género, rémoras de un pasado que no debe condicionarnos más en la búsqueda de una sociedad justa y con igualdad entre el hombre y la mujer.