De “menos Estado” a socio del Estado: la nueva contradicción de Globant
Una alianza tecnológica sin transparencia ni empleo nuevo
El acuerdo, anunciado en abril y formalizado en octubre, forma parte del Plan 4x4 de YPF, que busca modernizar la empresa y aumentar su competitividad global. El convenio no informa montos ni prevé la creación de nuevos puestos de trabajo, pero se presenta como una “transformación digital” orientada a mejorar la eficiencia operativa.
Globant desarrollará para la petrolera la plataforma Digital Suppl.AI, un sistema basado en inteligencia artificial agéntica —46 agentes virtuales que automatizan tareas administrativas y logísticas— con el objetivo de optimizar la cadena de suministro.
Hasta el momento, no se dieron a conocer las cifras del contrato, aunque fuentes del sector lo estiman en varios millones de dólares bajo el modelo de suscripción OPEX (servicios tecnológicos por abono mensual).
Más allá de su impacto económico, el acuerdo plantea una pregunta central: ¿a quién beneficia esta “transformación digital”? Porque no se menciona ninguna creación de empleo informático ni nuevas contrataciones para el desarrollo del sistema.
La paradoja de la eficiencia: automatización, despidos y beneficios estatales
La firma del convenio ocurre pocos meses después de que Globant confirmara el despido de más de 1.000 empleados a nivel global, justificando la medida en la “transformación impulsada por la IA”. El mismo argumento con el que hoy promociona sus servicios a YPF: mayor productividad, menores costos y menos intervención humana.
Sin embargo, Globant es también una de las empresas que más se benefician de los subsidios estatales otorgados por la Ley de Economía del Conocimiento, junto con Mercado Libre y Accenture.
Entre las 3, concentran casi el 50 % de los beneficios totales del régimen. En el caso de Globant, la contradicción es aún mayor: percibió estos beneficios incluso incumpliendo el artículo de la ley que obliga a las empresas beneficiarias a sostener e incrementar su plantilla de trabajadores. Mientras recibía apoyo fiscal, reducía personal.
El proyecto con YPF tampoco contempla la creación de nuevos puestos: está orientado a automatizar procesos de abastecimiento, inventarios y gestión de contratos, reemplazando tareas humanas por agentes de IA.
Esto contrasta con otros proyectos de YPF —como la inversión con ENI en Vaca Muerta— que sí prevén la generación de decenas de miles de empleos directos e indirectos.
El caso refleja una tendencia preocupante: la digitalización corporativa avanza, pero los beneficios laborales no acompañan.
Migoya y el Estado: del rechazo ideológico al pragmatismo empresarial
La alianza con YPF también deja al descubierto una contradicción política e ideológica. Martín Migoya, CEO y cofundador de Globant, ha sido uno de los empresarios argentinos más críticos con la intervención del Estado. En múltiples entrevistas, sostuvo que el sector público es “ineficiente” y que el país debía “achicar su estructura estatal para liberar la economía”.
Sin embargo, ahora firma un acuerdo millonario con una empresa estatal, que se financia con recursos públicos y actúa como motor estratégico del Estado nacional. El giro no es menor: la compañía que se presenta como símbolo de la iniciativa privada termina dependiendo del mismo Estado al que descalificó durante años.
Tecnología sin derechos: la mirada del sindicato
Desde la Asociación Gremial de Computación (AGC) y el Observatorio de Tecnología e Informática (OTI) analizamos esta alianza en su contexto real:
No se trata solo de innovación tecnológica, sino de cómo se distribuyen los beneficios de esa innovación. Si la IA reemplaza tareas sin garantizar estabilidad, salarios dignos ni representación, lo que crece no es la eficiencia: es la desigualdad.
Por eso insistimos en la importancia del Convenio Colectivo de Trabajo N.º 1696/23, ya homologado, que fija pisos salariales, categorías y derechos claros para todos los trabajadores del sector.
Solo con organización gremial y participación activa de los trabajadores se puede construir un futuro tecnológico que no deje a las personas atrás.
¡Contactate con tu gremio!